viernes, octubre 06, 2006


Sé que es de madrugada y estoy llorando
y en realidad no sé si hay horas para llorar
pero a esta altura me parece que es
un poco tarde o muy temprano
y que quizás debí hacerlo antes o tal vez
dejarlo para después,
dice la gente que son horas de dormir
pero cómo hacerle entender a tu cuerpo la
palabra descanso
cuando anda que no concibe la vida sin dar
batalla
y dar batalla es salir a perder,
porque en las que se gana
los victoriosos siempre mienten un poco
o hacen trampa
y perder me suena a ser humano
y perder hoy es un poco ganar
y ganar es incluso perder
y no quiero hacerle entender a nadie la razón de la sinrazón
y estas palabras son mías pero
seguramente ya se le habrán ocurrido a otro
porque al fin y al cabo, todo lo que a veces
quiero decir ya fue dicho
pero yo quiero decir lo que no dijo nadie.
Una rosa rojo intenso durmiendo sobre el gris del asfalto
eso no lo habrá dicho nadie,
a menos que a vos también se te haya aparecido tal
imagen transfigurada
una mañana en que el sol andaba con
vergüenza.
Esa mañana en que solamente yo habitaba
el colectivo y entonces había espacio,
pero no sobraba,
porque la gente y sus problemas,
y todas las cosas que va pensando,
y los destinos adonde va
y los minutos que llevan de retraso,
todo eso que hace que el aire se vuelva
denso y yo quiera bajar o echarlos a todos,
porque conmigo ya hay suficiente y a los
fabricantes les salió mal el cálculo.
Me siento siempre en el penúltimo asiento,
casi última, pero antes de última, uno antes de última, porque ser última no me gusta.
y a veces quiero ir llorando por la calle
pero no quiero que me pregunten,
porque de vez en cuando quiero salir a
enjuagar mis lágrimas y mostrarles
un poco la ciudad, sé que están cansadas de
tanto paisaje repetido.
Pero no sé imponerme ante las miradas
extrañas y no sé ni quiero explicarles que a
veces uno necesita llorar,
y a veces uno no llora para que le pregunten.
Un amigo siempre me dice "mi sonrisa es el
disfraz de mi tristeza" y yo pienso en que
debe ser por eso que somos amigos o quién sabe.


Me vas a decir que nunca te tragaste una
lágrima? pero no hablo de aguantar,
porque eso seguro.
Yo te hablo de cuando
sin querer te descienden por los labios y
vos te las bebés, son saladas viste?
qué pensás que bebés? por qué creés que sean saladas?
y no me vengas ahora con una explicación científica
de porqué lo son,
así como cuando pregunto por qué llueve
y me dicen siempre lo que yo no quiero escuchar.
Porque llueve de tanta gente quebrando en llanto,
y entonces el mundo colapsa.


Hey! no me echen la culpa a mí de que esté lloviendo ahora...


Quería rescatar este texto y subirlo acá, porque es muy personal.

1 comentario:

Ser dijo...

que lindo es saber que alguien se anima a llorar.. y a dejarse llorar...











q bueno que todo esto tenga sentido...



as it has...